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lunes, 29 de marzo de 2010

Respuestas para defender a la ICAR

El escándalo que vive la Iglesia Católica por centenares de abusos sexuales y psicológicos cometidos contra niños en todo el mundo a manos de algunos de sus sacerdotes ha traido toda clase de reacciones.

Estos hechos, que ante todo son delitos, y que la ICAR intentó ocultar deseperedamente, terminaron inevitablemente saliendo a la luz.

Una vez llegado el tiempo que los medios de comunicación llegasen a todos los rincones del mundo, que las victimas dejaran de ser niños, y que la Iglesia perdiera poder en Occidente, era cuestión de tiempo para que estos casos se conocieran. Tras la valentía de unos pocos casos en Estados Unidos en 1985, cada vez más victimas se han animado, y lo seguírán haciendo, asestando un duro golpe a la Iglesia de Roma.

Las denuncias que hoy aparecen en todos los medios, no buscan calificar a todos los sacerdotes católicos de pederastas, pero afectan la credibilidad y estatura moral de la ICAR por haber ocultado los casos y encubrir a los pederastas para evitar el escándalo.

Sin embargo, son desconcertates las reacciones que algunos prelados católicos y feligreses activos han tomado frente a este terrible escándalo.

Una de ellas nos llega desde Australia, donde el Arzobispo de Sydney, Cardenal George Pell, ha calificado la divulgación del escándalo en los medios de comunicación como "desinformantes" y se mostró a favor de un manejo "en privado". Las declaraciones son desafortunadas, ya que el manejo "privado" dado por la ICAR no llevó a la justicia a los pederastas, sino que garantizó la impunidad.

Pell dijo que "El tema es muy triste y demasiado serio para que circule desinformación generando mayor dolor en las víctimas" Luego, el Cardenal señalo que algunos medios suele referirse a la instrucción indicando que ésta "pedía a los obispos tratar las acusaciones con absoluto secreto y de informar a la policía bajo pena de excomunión". "La carta del Cardenal Ratzinger del año 2001 no hacía ninguna referencia a excomuniones", añadió.

Pell también dijo que, de los casos de pederastia en Australia que le ha tocado analizar, siempre ha alentado a las victimas a ir con la policía, pero son ellas las que prefieren mantener el asunto en privacidad.

Por otra parte, la historiadora católica Elizabeth Lev, que trabaja en Roma denunció que los medios de comunicación buscan por medio de la divulgación de este escándalo "destruir la fuerza moral de la Iglesia". Lev comparó el escándalo actual con los ocurridos a finales del siglo XVIII en Francia, lo que conllevó a un espíritu anticatólico y al asesinato de muchos presbíteros.

En palabras de Lev: "los salaces informes sobre los abusos sexuales del clero (como si estuvieran limitados solo al clero católico) han sido colocados por encima de las masacres de cristianos en India e Irak. Además, la frase ‘abuso sexual del clero’ se equipara erróneamente con ‘pedofilia’ para avivar aún más la indignación".

La historiadora católica hizo un paralelo con la situación francesa de finales del siglo XVIII, y mencionó que en aquel entonces Edmund Bunke, un protestante miembro del Estado inglés calificó los escándalos de entonces como una campaña contra la Iglesia. Lev citó las palabras de Bunke mostrándolas vigentes para los escándalos actuales: "no escucho con mucha credibilidad a quien habla del mal de aquellos a quienes van a saquear. Sospecho, en cambio, que los vicios a los que se refieren son fingidos o exagerados cuando se busca solo provecho en el castigo que planean".

Cuando Burke escribía esto, dice Lev, "los revolucionarios franceses estaban alistándose para la confiscación masiva de las propiedades de la Iglesia".

Por otra parte, el Vicario Emérito del Papa para la Diócesis de Roma y Ex Presidente de la Conferencia Episcopal Italiana, Cardenal Camillo Ruini, afirmó en una reciente entrevista que los graves casos de abusos sexuales cometidos por algunos sacerdotes se generaron gracias a la "revolución sexual" de los años 60’s que ha hecho que la sociedad esté "invadida por la exaltación de la sexualidad".


Respuesta también desconcertante la del Obispo de Toledo, Antonio Cañizares, quien respondió que el aborto es peor que los casos de abuso sexual en Irlanda.

Por su parte, Sivano Tomasi observador permanente del Vaticano ante la ONU, apuntó que la culpa de estos abusos era la homosexualidad, que su Iglesia tanto ha condenado. "No se debería hablar de pedofilia sino de homosexuales atraídos por adolescentes. De todos los curas implicados en casos de este tipo, entre el 80% y el 90% pertenecen a la minoría sexual que practica la efebofilia, es decir, los que tienen relaciones con varones de los 11 años a los 17"

Los obispos de Francia se manifestaron este 26 de marzo de 2010 para declarar que las acusaciones de encubrimiento de Benedicto XVI por los abusos sexuales en Estados Unidos eran difamatorias. El Presidente de la Conferencia Episcopal Francesa, Cardenal André Vingt-Trois, en la clausura de la asamblea plenaria de los obispos del país galo deploró la "campaña de difamación y calumnias organizada para ensuciar la figura del Papa Benedicto XVI".

Pedro Khupal, de Argentina, un feligrés católico seguidor del sitio AciPrensa se adherió al apoyo a la ICAR con estas palabras:

"Los católicos estamos siendo atacados tan tremendamente, que en lugar de estar en la ofensiva por la moral mundial, estamos a la defensiva. Un católico normal no aborta, trata de no divorciarse, evita las aberraciones sexuales, y en general trata de llevar una vida digna. Y resulta que aquellos que consideran que un matrimonio puede existir indiferentemente del sexo, que dos homosexuales pueden adoptar un niño, que el aborto es una solución fácil al problema de haberse olvidado de tomar la píldora, juzgan a toda la Iglesia porque algunos de sus miembros han fallado. Si, los sacerdotes pederastas han fallado, pero en un medioambiente de extrema tentación. Toda la humanidad parece estar en un estado de celo animal, donde el sexo parace ser el placer de mas fácil acceso. Los católicos somos seres humanos y caemos ante la tentación, pero nos arrepentimos y seguimos buscando el bien de todos. Quisieramos ser todos santos, pero no lo podemos, pero aun con nuestras fallas seguimos buscando el bien. En un mundo como el actual, esto es mucho, y si comparamos nuestras fallas con las de nuestros acusadores, nos tenemos que dar cuenta de nuestra enorme fortaleza moral."

Así pues, gracias a estos ilustres apologistas de la ICAR podemos concluir que la culpa de la pederastia de la Iglesia Católica no reside en el clero, ni sus dirigentes tienen culpa de estos crímenes. La culpa está fuera de la santa Madre Iglesia, y justo en lo que esta repudia y rechaza: la sexualidad, y sobre todo la homosexualidad. Los sacerdotes abusadores son efebófilos y no pederastas, y más importa aún, la Iglesia está bajo un ataque mediático que desea "destruir la fuerza moral de la Iglesia", atacar al Santo Padre, y son fruto de una conspiración anti-católica. No hay aún un "mea culpa" por encubrir a los delicuentes, ni un asomo de reflexión sobre el papel que la abstinencia sexual forzosa (celibato) pueda tener en estos casos.

¿Y usted qué opina?

2 comentarios:

  1. Es muy sencillo.

    En vez de aceptar sus propias culpas,la ICAR desvia la atención hacia otros temas, como la violencia islámica. Bien dice la frase popular "los pecados de unos no hacen santos a otros".

    La actitud de la ICAR bien corresponde almodus operandi de las dictaduras y sus élites; en vez de ventilar el tema con transparencia prefieren tratarlo como "tema privado", con las consiguientes consecuencias de encubrimiento.

    "Destruir la fuerza moral de la Iglesia".. al parecer la historiadora tienen un sentido de "fuerza moral" muy peculiar. ¿a qué clase de "fuerza moral" o "moral" se referirá?

    En la historia-que quizás ella edite- el mismo dogma del Vaticano se auto descredita muchas veces por sí sola. La Reforma surge justamente por la corrupción en que cae la Iglesia Católica, ante su sistema de privilegios y venta de indulgencias.

    Asi , ¿cómo pretende ser la institución infalible e inequívoca con derecho a reglamentar el mundo, con un derecho que proviene de una supuesta divinidad cuya existencia no pueden probar con certeza?.

    Quien no se percata de esto, o es muy ignorante, o hace el uso de un "doblepensar orwelliano". Al menos el ignorante puede aprender....

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  2. -----Debemos de llamar las cosas por su nombre.
    -----La S.I.C.A.R.I.A. (santa iglesia católica apostólica romana infalible asesina) ,y sus divinas leyes canónicas inspiradas para proteger ....¡digo! encubrir a sus socios y accionistas privados , al parecer pasan por alto o por bajo la agresión y el abuso de sus socios minoritarios más desvalidos alegando el conocido ¡¡YO NO FUÍ!!

    Iglesia lease Empresa.

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