Páginas relacionadas

lunes, 26 de enero de 2015

¿Desaparecerá alguna vez la religión?

El aumento del ateísmo en el mundo llevó a Rachel Nuwer a consultar con expertos en sociología y psicología sobre el futuro de las religiones.


El ateísmo está en alza en todo el mundo. ¿Significa esto que la espiritualidad pasará pronto a ser algo del pasado?

"Hay muchos más ateos en la actualidad que nunca antes, tanto en números absolutos como en porcentaje sobre el total de la Humanidad", explica Phil Zuckerman, profesor de Sociología y Estudios Seculares en el Pitzer College, Estados Unidos.

Lee también: Los países en que ser ateo está castigado con la muerte

Según una encuesta internacional de Gallup realizada entre más de 50.000 personas de 57 países, el número de personas que se consideran religiosas descendió del 77% al 68% entre 2005 y 2011.

El número de quienes que se consideran a sí mismas ateos aumentó un 3%, hasta representar el 13% del total.

A pesar de que quienes declaran que no creen en ningún dios ciertamente no son la mayoría, ¿será que esta tendencia es un pronóstico de que la fe en una divinidad en el futuro pasará a ser algo del pasado?

Es imposible predecirlo pero al examinar lo que sabemos de la religión podemos encontrar pistas de lo que puede pasar.

Parte del atractivo de una fe es que ofrece seguridad en un mundo incierto, de manera que no es sorprendente que las naciones con mayores índices de ateísmo tienden a ser aquellas que proveen a sus ciudadanos con una estabilidad económica, existencial y política relativamente alta.

Japón, Reino Unido, Canadá, Corea del Sur, Holanda, República Checa, Estonia, Alemania, Francia y Uruguay son países en los que la religión era muy importante hace apenas un siglo, pero en los que en la actualidad las tasas de creyentes se sitúan entre las más bajas del mundo.

Iglesia convertida en biblioteca en Sevilla, España.
En muchos países europeos el avance del agnosticismo
y el ateísmo están dejando desocupadas las iglesias.
En todos estos países hay sistemas educativos y de seguridad social fuertes, baja desigualdad social y sus ciudadanos son relativamente ricos.

"La gente tiene menos miedo de lo que pueda pasar", dice Quentin Atkinson, psicólogo de la Universidad de Auckland, Nueva Zelanda.

No obstante, el descenso del número de personas creyentes se produce incluso en países que son todavía muy religiosos, como Brasil, Jamaica o Irlanda.

"Pocas sociedades son hoy en día más religiosas de lo que eran hace 40 o 50 años" dice Zuckerman.

Naturaleza y sobrenatural


Evangélicos chilenos rezando tras terremoto en Tacna.
Los desastres naturales han llevado al ser humano a
refugiarse en entes sobrenaturales sin importarle
la realidad de su existencia.
El descenso en creyentes, sin embargo, no significa la desaparición de las religiones, explica Ara Norenzatan, psicóloga social en la Universidad de British Columbia, en Canadá, y autora de "Big Gods".

La seguridad existencial es más falible de lo que a veces parece. De repente, todo puede cambiar: un accidente puede matar a un ser querido; un huracán puede destruir un pueblo; un doctor puede darnos un diagnóstico fatal.

Los estragos del cambio climático que se esperan para los próximos años, así como la escasez de recursos naturales y el sufrimiento que todo esto puede generar, podría potenciar la religiosidad.

"Por alguna razón, la religión parece darle significado al sufrimiento, más que cualquier ideal o creencia secular que conozcamos", dice Norenzayan.

Ese fenómeno de religiosidad repentina se ha observado en casos como el terremoto de Christchurch, Nueva Zelanda, en 2011: en ese lugar hubo un alza en la fe, mientras que el resto del país se mantuvo tan incrédulo como de costumbre.

Cuando haya paz en el mundo

Sin embargo, incluso si los problemas del mundo se solventaran de forma milagrosa, y todos viviéramos vidas pacíficas en igualdad, la religión probablemente sobreviviría.

Esto se debe a que parece haber un espacio con la forma de un dios en la neuropsicología humana, resultado de una peculiaridad en nuestra evolución.

Para entenderlo hay que conocer la teoría del "proceso dual", que describe dos formas básicas de pensamiento, conocidas como el Sistema 1 y el Sistema 2.

El Sistema 2 evolucionó hace relativamente poco. Es la voz en nuestra cabeza, el narrador que parece no callarse nunca, que nos permite planificar y pensar de forma lógica.

El Sistema 1 es intuitivo, instintivo y automático. Estas capacidades se desarrollan en los humanos independientemente de dónde hayan nacido. Son mecanismos de supervivencia.

Niños de padres mormones con el presidente del mormonismo Gordon B. Hinckley.
El sistema 1 interno lleva a los seres humanos desde su infancia
 a ser proclives a creencias irracionales.
Este sistema nos proporciona, por ejemplo, una repulsión innata a la carne podrida, nos permite hablar nuestra lengua materna sin pensarlo mucho y le da a los bebés la capacidad de reconocer a sus padres y distinguir entre objetos con o sin vida.

Además, hace que tengamos una tendencia a buscar patrones para entender mejor el mundo, y a encontrar un significado a sucesos aparentemente arbitrarios, como los desastres naturales y la muerte de seres queridos.

Y, según algunos investigadores, es el que abrió el camino para que las religiones evolucionaran y se perpetuaran.

El Sistema 1 nos lleva a ver las cosas de forma dual, de forma que nos cuesta ver a nuestro cuerpo y nuestra mente como una única unidad.

Esta tendencia nace muy temprano: los niños de todas las culturas se inclinan a creer que tienen un alma inmortal: que su esencia o personalidad existió en algún lugar antes de su nacimiento y continuará existiendo por siempre.

Y esta disposición se asimila fácilmente con muchas de las religiones existentes, o -con algo de creatividad- se presta para construir nuevas.

Píldora difícil de tragar

Por todas estas razones, los investigadores creen que la religión es un "producto secundario de nuestra disposición cognitiva", explica Robert McCauley, director del Centro de la Mente, el Cerebro y la Cultura de la Universidad de Emory, en EE.UU., y autor de "Por qué la religión es natural y la ciencia no".

"La ciencia es cognoctivamente antinatural, y es difícil. La religión, en cambio, es algo que casi no tenemos ni que aprender pues ya lo sabemos".

"Hay evidencia de que el pensamiento religioso obedece a la ley del menor esfuerzo;
se tendría que cambiar fundamentalmente algo en la humanidad para deshacerse de la religión".

Robert McCauley, director del Centro de la Mente, el Cerebro y
la Cultura de la Universidad de Emory, en EE.UU.,
"Hay evidencia de que el pensamiento religioso obedece a la ley del menor esfuerzo; se tendría que cambiar fundamentalmente algo en la humanidad para deshacerse de la religión".

En contraste, la ciencia -el sistema preferido de muchos ateos y no creyentes para intentar entender el mundo natural- trata de corregir los sesgos del Sistema 1, dice McCauley. Pero, agrega, es una píldora difícil de tragar.

Debemos aceptar, por ejemplo, que la Tierra gira, así no lo sintamos, aún viviendo en ella; debemos adoptar la idea de que la evolución es completamente indiferente y que no hay ningún propósito o plan para el Universo, así nuestra intuición nos diga lo contrario.

Tampoco nos queda fácil admitir que nos equivocamos y aceptar que la verdad como la comprendemos constantemente está cambiando a medida que surgen nuevas pruebas empíricas, y todo eso es imprecindible para la ciencia.

Fantasmas y deportes

Curiosamente, muchos en todo el mundo que dicen no creer en un dios muestran tendencias supersticiosas, como la creencia en los fantasmas, el karma, la telepatía o la reencarnación.

Además, los no creyentes a menudo dependen de cosas que pueden ser interpretadas como sustitutos de la religión -equipos de deportes, yoga, instituciones profesionales, la Madre Naturaleza, etc.- como guías de sus valores.

"Parecería como si tuvieramos un espacio conceptual para el pensamiento religioso que si no se llena con una religión, brota de maneras sorprendentes", concluye Barrett.

La religión, además, promueve la cohesión grupal y la cooperación. La amenaza de uno o varios dioses poderosos que vigilan que nadie se salga de lo establecido seguramente ayudó a mantener el orden en las sociedades.

"Si todo el mundo cree que el castigo es real, esto puede ser funcional para los grupos" dice Atkinson.

Cuestión de números
Muchas personas piensan que con el aumento de la ciencia
 la religión desaparecerá. Los expertos no están de acuerdo.
Una razón es que las personas
religiosas suelen tener más descendencia que las
personas ateas o agnósticas.
En la imagen, un grupo de niños criados en el islam en Medio Oriente.

Finalmente, las matemáticas también están del lado de la permanencia de la religión: las personas religiosas tienden a tener más hijos que las que no lo son.

Si consideramos que los hijos suelen seguir a sus padres en estos aspectos, un mundo totalmente secularizado parece una posibilidad aún menos factible.

Por todas estas razones psicológicas, neurológicas, históricas, culturales y lógicas, los expertos creen que la religión nunca desaparecerá. La religión, así sea mediante el miedo o el amor, es muy exitosa a la hora de perpetuarse.

E incluso si perdemos de vista a los dioses cristianos, musulmanes e hindúes, es muy probable que prevalezcan las supersticiones y el espiritualismo.

Cuando enfrentemos una guerra nuclear o el choque inminente con un cometa, los dioses aparecerán.

¿Y usted qué opina?

viernes, 23 de enero de 2015

Un agujero gusano en el patio cósmico

Un equipo de astrofísicos en Italia nos dice que existe la posibilidad de que haya un túnel de gusano en la Vía Láctea que tenga el tamaño de la galaxia misma y que la materia oscura sea otra dimensión




Por Glenys Álvarez

En definitiva, algunas investigaciones en cosmología y astrofísica son sobrecogedoras y difíciles aún de imaginar. Sin embargo, los agujeros gusanos, también llamados Puentes Einstein-Rosen, son populares entre los amantes de la ciencia ficción debido a las posibilidades que su mera existencia presentan. Ahora, precisamente, con la película Interestelar, estos agujeros se han convertido nuevamente en una tendencia, a pesar de que los investigadores en el área llevan mucho tiempo estudiando las probabilidades de su existencia.

Un equipo de la Escuela Internacional de Estudios Avanzados en Trieste (SISSA), nos presenta en esta ocasión un mapa del universo que asegura la presencia de estos intrigantes túneles gusanos en, nada más y nada menos, que nuestra propia galaxia, la colosal Vía Láctea.

“Si combinamos el mapa de la materia oscura en la Vía Láctea con el más reciente modelo del Big Bang para explicar el universo junto a la hipótesis de la existencia de túneles en el espacio-tiempo, lo que obtenemos es que nuestra galaxia podría contener realmente uno de estos túneles y que el túnel podría incluso ser del tamaño de la propia galaxia. Pero hay más. Podríamos incluso viajar a través de este túnel, ya que, sobre la base de nuestros cálculos, podría ser navegable”, explica Paolo Salucci, astrofísico de SISSA. “Claramente, esta investigación la hicimos mucho antes que Interestelar”, expresó bromeando.

Precisamente, la película Interestelar propone un agujero gusano en la Vía Láctea que es utilizado por los protagonistas para buscar otro planeta fuera del Sistema Solar donde la especie humana pueda sobrevivir. Por supuesto, esta afirmación extraordinaria requiere de evidencias extraordinarias que la demuestren de forma experimental. Los físicos no están seguros cuándo eso será posible.

“En un principio, podríamos demostrarlo comparando dos galaxias, nuestra galaxia con otra que esté cercana, como la Nube de Magallanes, por ejemplo, pero todavía estamos muy lejos de cualquier posibilidad real de hacer una comparación de este tipo”.

El equipo liderado por Salucci combinó las ecuaciones de la relatividad general en un mapa detallado sobre la distribución de la materia oscura en la Vía Láctea, las propuestas a las que llegan con sus resultados son realmente sorprendentes pues ofrecen una alternativa al neutralino, que ha sido presentado como una de las partículas candidatas para conformar la materia oscura. Sin embargo, esta partícula es aún hipotética, igual que el neutrino estéril, protagonista de una investigación anterior por el doctor Alexey Boyarsky, profesor de física en la Universidad Leiden en los Países Bajos, quien publicó los resultados de análisis de una señal que piensan fue originada por la aniquilación o desintegración del neutrino estéril, un proceso que libera rayos X.

"Este pequeño exceso (de varios cientos de fotones adicionales) se ha interpretado como procedente de decaimientos muy raros de partículas de materia oscura", explicó Boyarsky. "Aunque la señal es muy débil, ha pasado varios 'chequeos de sanidad' que nos dicen se trata de una señal de la descomposición de materia oscura".
Pero a lo mejor no se trata de un neutrino sino de un umbral por el cual podemos manejar y arribar a otras dimensiones. Eso realmente sería una noticia de otro mundo.

“Los científicos siempre han tratado de explicar la materia oscura a través de la hipótesis del neutralino el cual, sin embargo, nunca ha sido identificado en el CERN ni observado en el universo. Pero también existen teorías alternativas que no dependen de la partícula, y tal vez es hora de que los científicos tomen este asunto más en serio. La materia oscura podría ser otra dimensión, tal vez incluso un importante sistema de transporte galáctico. En cualquier caso, lo que realmente necesitamos es comenzar a preguntarnos qué es”.

El equipo obtuvo el mapa que utilizaron de un estudio hecho en el año 2013. Por supuesto, Salucci explica que no están afirmando que exista un agujero de gusano en nuestra galaxia, pero sí están diciendo que existe esa posibilidad y que quizá sea más probable de lo que imaginamos.

"Más allá de la hipótesis de la ciencia ficción, nuestra investigación es interesante porque propone una más compleja reflexión sobre la materia oscura".

Imagen: SISSA (Salucci)
Los resultados de este estudio fueron publicados en el diario Annals of Physics: http://www.sciencedirect.com/science/journal/00034916
Enlace de SISSA: http://www.sissa.it/
Edición: www.editoraneutrina.com

miércoles, 21 de enero de 2015

El Papa Francisco y su apología a la violencia


Si insultan a mi mamá

Por Héctor Abad Faciolince.


El viernes, apenas leí que el papa había dicho, muy virilmente, que “si alguien dice una palabrota sobre mi madre puede esperarse un puñetazo” (la atenuada versión papal de “le doy en la cara marica”), me apresuré a llamar a mi madre, nonagenaria y muy católica ella.

A mí —y me perdonarán que ensucie las limpias páginas de El Espectador con malas palabras— por casi todo lo que escribo, semana tras semana, me dicen idiota, ignorante, gonorrea, malparido y, sobre todo, hijueputa. Por eso, preocupado con el consejo del papa, corrí a preguntarle a mi mamá: “¿A ti te parece que si alguien me dice que tú eres puta yo tengo que pegarle un puño?”. Y ella, sin pensarlo un instante: “No, no se le debe pegar a nadie”. Le agradecí la respuesta y la enseñanza porque si no cada semana yo tendría que estar rastreando tuiteros, blogueras, feisbuqueros, para pegarles un baculazo papal en la cabeza.

A raíz de la masacre de Charlie Hebdo se han dicho muchas tonterías. Yo mismo las he dicho al aplicarle una aritmética barata al islam para demostrar que muchos de sus fieles viven todavía en la edad media. Las cosas son mucho más complejas que cualquier simplificación retórica que uno se invente por eficacia argumentativa. Pero también han dicho idioteces quienes sostienen que los caricaturistas se buscaron su castigo; o quienes explican el asesinato de cuatro judíos que compraban comida kosher porque el ejército de Israel ha matado muchos palestinos; y hasta las ha dicho el papa, en italiano, al afirmar que “Non si può insultare la fede degli altri, non si può prendere in giro la religione” (no se puede insultar la fe de los demás, no se le puede mamar gallo a la religión). Aunque la tontería más frecuente, y repetida hasta la náusea, es que “hay que respetar las creencias del otro”.

Esta última frase, más que una tontería, es un lugar común que suena muy bien, pero que confunde dos derechos muy distintos. Uno es el derecho a creer lo que cada uno quiera: cada cual es libre de creer en Cristo, en Mahoma, en la homeopatía, en el Big-Bang, en nada, en la astrología, en las brujas, en que la Tierra es cuadrada. Ese es un derecho, el de la libertad de pensamiento y conciencia. Cada cual cree lo que quiere. Pero al mismo tiempo que uno afirma que el otro tiene derecho a creer lo que quiera, también puedo afirmar que yo tengo derecho a criticar sus creencias, a ponerlas en duda, a no respetarlas, a reducirlas al absurdo (lo cual es una forma de burla intelectual), a caricaturizarlas. Usted tiene derecho a creer que Mahoma es sagrado, intocable, incriticable y que está prohibido dibujarlo, pero yo tengo derecho a decir que no me parece sagrado, ni intocable, y que me parece criticable y susceptible de ser dibujado.

A las Farc hay que respetarles que crean en el comunismo y en el modelo económico chavista, y que lo defiendan con argumentos, pero yo tengo derecho a burlarme de su modelo económico y de sus convicciones comunistas. Y Uribe tiene derecho a pensar que una sociedad de terratenientes es sana, o Santos a creer que el capitalismo es lo mejor que existe para que una sociedad crezca, pero yo puedo ridiculizar la ideología finquera de Uribe y el libre mercado de Santos.

Ahora a algunos les ha dado por decir que uno puede criticar y se puede reír de todo menos de la madre o de la religión de los demás. Pues hombre, puede que no sea de buen gusto, ni recomendable en ciertas circunstancias, pero de ahí a prohibirlo o a castigarlo con coscorrones (no digamos con kalashnikovs) el paso es muy largo. Si por respeto a las creencias religiosas de los musulmanes yo no puedo criticar que en la gran mayoría de los países islámicos se castigue severamente (incluso con pena de muerte) el adulterio y el cambio de religión (la apostasía), entonces se acabó la libertad de expresión.

Y ahora sí, tranquilos, insulten a mi mamá. De ella aprendí a no pegarle a nadie. Si mucho les respondo de palabra y por igual: ¡la tuya!


El Papa Francisco y su apología a la violencia.


martes, 20 de enero de 2015

En dos lugares el mismo tiempo

¿Está regido el mundo subatómico por leyes distintas a las del mundo macro o las mismas leyes son percibidas distintas en ambos mundos? Un nuevo experimento con átomos de cesio sugiere que la observación elimina la superposición en el mundo macro




Por Glenys Álvarez

Imagina que lances una bola de papel a la papelera y que obtengas dos resultados distintos: una bola de papel está ahora dentro de la papelera, pero la misma bola también se encuentra fuera de ella. No estamos acostumbrados a este tipo de resultados en nuestro mundo de física clásica, pero es lo que ocurre en la cuántica todo el tiempo. La física aún no sabe con precisión si en el mundo real eliminamos de nuestra percepción los demás resultados cuánticos o si ambos mundos reaccionan a reglas distintas. Precisamente, en esta ocasión un equipo de investigadores de las universidades de Bonn en Alemania y Hull en el Reino Unido, ha hecho un experimento observando esta rareza conocida como superposición. El grupo usó átomos de cesio y observaron de forma indirecta que uno toma dos trayectorias simultáneamente.

La cuántica nos habla de una perspectiva distinta que no somos capaces de percibir con los sentidos que poseemos. Científicos como Heisenberg y Schrödinger, para nombrar sólo un par, vienen relatando esta interesante y cuántica historia desde hace décadas (creo que con el segundo comenzó el gusto por los gatos para estos experimentos) una historia que Einstein tampoco supo interpretar correctamente ya que es distinto del mundo de la también extraña física 'clásica'.

Por lo tanto en nuestra realidad, la bola de papel que lanzamos a la papelera cae dentro de ella o no, las dos cosas no ocurren al mismo tiempo como en la superposición cuántica. Como lo expuso el doctor Andrea Alberti del Instituto de Física Aplicada en Bonn, existen dos diferentes interpretaciones para este gran tema, o somos distintos de la cuántica o simplemente producimos un mundo macro con las mismas reglas subatómicas.

“La mecánica cuántica permite estados de superposición de objetos grandes y macroscópicos. Pero estos estados son muy frágiles, incluso seguir la pelota con los ojos es suficiente para destruir la superposición y hacer que siga una trayectoria definida”.

Eso es algo realmente extraño, que la simple observación de un proceso lo selle en una trayectoria específica y no en otra; nos hace pensar sobre multiversos y mundos paralelos. No obstante, es una de las claves en los experimentos teóricos de Schrödinger con su gato en una caja, una vez observamos lo que ocurre, sellamos un resultado y erradicamos el otro. Como dijimos anteriormente, no todos piensan igual, algunos aseguran dentro de una teoría macrorrealista, que los elementos en el mundo macro obedecen leyes físicas distintas a las del mundo subatómico.

"El reto era desarrollar un esquema de medición de las posiciones de los átomos que nos permitiera falsificar teorías macrorrealistas", añadió Alberti.

Los resultados del experimento concluyen que durante la superposición, la observación del resultado erradica uno de los caminos, es decir, la observación sella uno de los resultados eliminando el otro. Para elaborar el experimento, los investigadores agarraron un átomo de cesio con una pinzas ópticas y lo arrojaron en dos direcciones distintas y opuestas, tirando del átomo en el proceso. En el mundo macro, el objeto llegaría a sólo una posición final, en el cuántico, sin embargo, los átomos tomaron dos distintas y de forma simultánea. El experimento mostró precisamente eso, el átomo se superpuso en dos lugares al mismo tiempo.

“Lo que hemos hecho es determinar de la forma más sutil posible la posición final del átomo a través de medidas indirectas", explica Carsten Robens, uno de los miembros del equipo.

De hecho, la imagen indica que hasta tales mediciones indirectas pueden modificar significativamente el resultado de los experimentos. Supongamos que tenemos dos contenedores y un gato (otra vez) "está escondido debajo de uno (a) pero no sabemos cuál, ahora bien, si levantamos tímidamente el que está a la derecha (b) y lo encontramos vacío, llegaremos a la conclusión de que el gato está en el otro que no hemos tocado. Ahora bien, si en vez del derecho levantamos el izquierdo, habríamos molestado al gato (c) y tendríamos que desechar la medida. En el mundo macrorrealista, este esquema de medición no tendría influencia alguna sobre el estado del gato, pero en el mundo cuántico hasta una medida negativa que revele la posición del gato, como en (b), ya sería suficiente para destruir la superposición cuántica e influir en el resultado del experimento. Los físicos de Bonn han observado exactamente este efecto", escribieron los investigadores.

“Esta observación excluye o falsifica, como lo expondría Karl Popper, la posibilidad de que los átomos de cesio sigan una teoría macrorrealista. En su lugar, los resultados experimentales se adaptan bien a una interpretación basada en estados de superposición que se destruyen cuando se produce la medición indirecta. Todo lo que podemos hacer es aceptar que el átomo ha tomado diferentes caminos de forma simultánea”.

Los científicos son cautos en hacer afirmaciones hasta elaborar más confirmaciones del evento.

"El siguiente paso es separar las dos posiciones del átomo de cesio varios milímetros. Si nuevamente encontramos la superposición, la teoría macrorrealista sufriría un nuevo revés”, explica Alberti.


Crédito de imagen: Andrea Alberti / www.warrenphotographic.co.uk
Puedes leer el artículo en inglés aquí: https://journals.aps.org/prx/abstract/10.1103/PhysRevX.5.011003

jueves, 8 de enero de 2015

Pastor adventista se vuelve ateo

A principios de 2014, el pastor Ryan Bell, de la Iglesia Adventista del Séptimo Día en California, anunció que iba a vivir un año como ateo y que escribiría un blog para contar su experiencia.

Bell era un ministro ordenado había pastoreado iglesias durante 19 años hasta que recientemente se convirtió en profesor en dos universidades cristianas y luego proporcionó asesoramiento a las iglesias. En marzo de 2013 se le pidió que renunciara a ser pastor por empezar a cuestionar doctrinas de la iglesia. Bell era visto como muy liberal. De hecho consideró siendo pastor que no debería excluirse a las personas gays y lesbianas. 

Bell, después de tener dudas y de verse amenazado de perder su trabajo dijo que quería saber cómo “vivir sin orar, sin leer la Biblia o simplemente sin pensar en Dios”. Después de este anuncio, la universidad adventista lo despidió. La ayuda vino de los ateos. Una campaña fue creada por los movimientos humanistas para ayudar a Bell a sostenerse, recaudando unos 27 mil dólares. Ahora está trabajando en el PATH, una organización no gubernamental dedicada a alimentar y ayudar a las personas sin hogar.

En una entrevista con NPR, una radio con gran audiencia estadounidense. afirmó: “Yo no creo que Dios existe. Creo que tiene más sentido las evidencia que tengo y mi experiencia”.


“Es una expresión de una parte de mí que no ha cambiado. Sigo siendo la misma persona, en el fondo que era antes. Me preocupo por la justicia y la igualdad, y quiero ver la igualdad de oportunidades en nuestra sociedad”, dijo.

Reconoce que el ateísmo es “un ajuste extraño”, y que tiene dificultad para caminar con sus antiguos amigos cristianos. “Antes yo quería una relación más estrecha con Dios, y ahora sólo quiero una relación más estrecha con la realidad”, dijo.

El caso de Ryan Bell recuerda el de Dan Barker, otro ateo que fue antes un pastor.
(Para conocer más del expastor adventista: Su facebook - Su blog )

Por otra parte, el instituto Gallup Internacional realizó una entrevista en 57 países en relación con las creencias religiosas y se encontró que el número de ateos aumentó de 3% a 13% entre el 2005 y el 2011.

En una entrevista con la BBC, Phil Zuckerman quien es profesor de sociología y estudios seculares de Pitzer College (California – EE.UU.), dijo que el crecimiento de los ateos es visible en todo el mundo. “Hay más ateos en el mundo actual que nunca, tanto en números absolutos como en porcentaje de humanidad”.

Uno de los principales factores de este crecimiento fue la estabilidad económica y política de algunos países europeos donde el secularismo ha avanzado hasta el punto de rebasar el número de religiosos.

Países como Canadá, Japón, Gran Bretaña, Holanda, Alemania, Francia, República Checa y Uruguay tienen los menores índices de creencia religiosa en el mundo, mientras que Estados Unidos ya tiene el 2,4% de su población compuesta por ateos.

Enlaces relacionados en SinDioses sobre adventismo, ex adventistas ahora ateos y Dan Barker:

- La segunda venida de Cristo: El gran engaño
Elena G. de White y los adventistas del séptimo día
- ¿Cómo puede ser moral un ateo? - Por Dan Barker, expastor, ahora activista ateo.
Elena G. de White profetizó el 11 de septiembre. Una respuesta en nuestra sección "Cartas de la Edad media".