Según informa Gizmodo el pasado jueves 2 de noviembre, en una conferencia científica en Ottawa, la gobernadora general de Canadá, Julie Payette, dirigió algunos duros comentarios a los astrólogos y negacionistas del cambio climático.
En momentos en que los religiosos y posmodernos atacan la ciencia, es francamente maravilloso que un funcionario público haga una defensa de la ciencia y ingeniera eléctrica y de computación que volado en dos misiones del Trasbordador espacial ( en 1999 y 2005). Payette, quein tiene un registro de 25 días en el espacio, ha aprovechado para promocionar la ciencia entre el pueblo canadiense.
En la Conferencia Canadiense de Política Científica de la pasada semana, la gobernadora dijo que ya es hora que los canadienses dejen de lado creencias no basadas en la evidencia como la astrología y la intervención divina en lo que son fenómenos naturales, También lanzó duras críticas contra los grupos que se empeñan en negar que la actividad humana es responsable del cambio climático.
"Mucha gente ... todavía cree, o quiere creer, que tomando una pastilla de azúcar curará el cáncer ... y que su futuro [y su personalidad] ... puede determinarse observando los planetas que se adelantan a inventadas constelaciones"
Sobre el tema del cambio climático, Payette dijo: "¿Pueden creer que todavía hoy (...) en las casas de gobierno, lamentablemente, estemos aún cuestionando si los humanos tienen un papel en el calentamiento de la Tierra o, incluso, si la Tierra se está calentando?
Luego prosiguió ¿Pueden creer que aún seguimos debatiendo y cuestionando si la vida fue resulado de una intervención divina, o si proviene del proceso natural y aleatorio de la selección natural darwiniana?.
El primer ministro de Canadá, Justin Trudeau elogió el discurso de Payette y dijo que "Los canadienses son personas que entienden el valor de la ciencia y el conocimiento como base para el futuro de nuestro país".
Sin embargo, no todos quedaron contentos con este discurso, ni con la aprobación hecha por el Primer ministro. El reportero Aaron Wherry en CBC News. afirmó que "Quienes lean y escriben los horóscopos tienen derecho a ofenderse". Luego añadió: "[Y] por muy firme que se sienta acerca de la ciencia de la evolución, las creencias religiosas en general deben considerarse sacrosantas, o al menos un tema que el ocupante designado de Rideau Hall debería evitar comentar".
Nuevamente el argumento de que las creencias religiosas tienen un halo de protección especial que debe hacerlas inmunes de toda crítica.
El líder conservador Andrew Scheer arremetió contra el Primer Ministro por su apoyo al discurso. "Es extremadamente decepcionante que el primer ministro no apoye a los pueblos indígenas, musulmanes, judíos, sijs, cristianos y otros grupos de fe que creen que hay verdad en su religión", dijo en un comunicado publicado en Facebook. "El respeto por la diversidad incluye el respeto por la diversidad de creencias religiosas, y Justin Trudeau ha ofendido a millones de canadienses con sus comentarios".
Nuevamente, se cree que las creencias religiosas deben ser respectadas. No. Se respeta el derecho a las personas a profesar y practicar un culto, pero las ideas no son, ni pueden ser respetadas. Deben ser analizadas.
En todo caso, este aire fresco, contrasta con el aire de anticiencia que recorre a Estados Unidos con la derecha evangélica en el poder y Latinoamérica (exceptuando Uruguay) que parece recorrer el mismo camino.