La iglesia de Jesucristo de los Santos de los últimos Días es una religión que para muchos no es cristiana. Cuenta con una serie de creencias particulares muy diferentes a las iglesias cristianas corrientes. Creen en el bautismo por los muertos, que cada persona preexistió antes de nacer como espíritu y que Jesús al resucitar visitó América. Ya en la página principal de Sindioses.org tenemos un ensayo dedicado a este particular credo titulado
"Una mirada escéptica al mormonismo"
La siguiente nota, publicada por noticias 24.com nos muestra el crecimiento de esta religión, inventada por José Smith en el siglo XIX, en Latinoamérica:
La comunidad mormona crece en América LatinaUna mañana temprano durante el verano en Buenos Aires, dos misioneros mormones reciben a unos 100 fieles que participarán de una maratón de tres horas de sermones, canto y debate, en una capilla de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días en el barrio de Belgrano.
Al igual que en el resto de Latinoamérica, donde el catolicismo es amplia mayoría, oratorios como éste se están multiplicando en Argentina y la región se jacta de tener la mayor comunidad de mormones fuera de Estados Unidos, con unos
5,2 millones de miembros.
Globalmente, la iglesia dice tener
13,5 millones de miembros, un número similar o incluso mayor al de la comunidad judía en el mundo. Desde 1950 los mormones se extendieron rápidamente por América Latina, en parte por la proximidad geográfica con Estados Unidos, donde nació la religión.
La percepción de estabilidad y el estatus de la iglesia da también un respiro a muchos latinoamericanos que han sido golpeados por crisis económicas y políticas.
“Para mí, en un principio no fue fácil (…) Pero hoy tengo la fe, que es como un escudo que tengo hacia la sociedad de hoy en día”, dijo Diego Lacho, un joven de 28 años que se unió recientemente a la congregación de la capilla de Belgrano, un vecindario de clase media alta de Buenos Aires.
Lacho, trabajador de un casino, se casó con una mormona hace tres años y fue bautizado en agosto. Ahora sigue las reglas que tiene el culto contra el cigarrillo, el alcohol y el café y se reúne en la capilla con hombres bien afeitados, vestidos de traje con camisas impecablemente planchadas, y mujeres ataviadas con faldas o vestidos.
El salón de madera y terciopelo se llena dos veces cada domingo y es apenas una de las 692 capillas de Los Santos de los Ultimos Días que hay en Argentina.
En Latinoamérica hay 5.500 oratorios similares, tres veces la cantidad que existía en 1970.
“Fui misionero en Chile hace unos 30 años y en ese momento la iglesia recién estaba empezando a crecer en Sudamérica", dijo Elder Shane Brown, presidente de la congregación de la iglesia en Argentina, Uruguay y Paraguay.
“Había una profecía que decía que la iglesia se expandiría lentamente en Sudamérica pero que después crecería como un roble, y yo soy realmente un testigo de eso", agregó.
La comunidad mormona también creció con fuerza en Filipinas. La expansión en otros lugares de Asia ha sido más lenta y en Europa los inmigrantes latinoamericanos representan gran parte del crecimiento.
El sociólogo Cesar Ceriani, quien recientemente publicó un libro sobre el trabajo misionero de los mormones en Argentina, sostuvo que los latinoamericanos ven a la iglesia de Los Santos de los Ultimos Días como confiable y económicamente poderosa, en una región a menudo plagada de inestabilidad y corrupción.
La iglesia tiene ingresos anuales estimados en 5.000 millones de dólares a nivel global y en todas partes está expandiendo sus gastos en nuevos templos y capillas y en proyectos de ayuda como pozos de agua limpia, hospitales y material educativo.
“Tiene importancia la posibilidad de que la iglesia sea un medio o una herramienta para acceder tal vez a una mejor posición o trabajo. O también tener un grupo social que le dé más estabilidad o lo apoye más", agregó.
Líderes regionales de la iglesia también dicen que en Latinoamérica la mayoría de personas desconoce los escándalos que afectan a la iglesia en otros lugares, como la atención mediática que alcanzaron en Estados Unidos las prácticas poligámicas de mormones fundamentalistas.
También enfatizan que estos fundamentalistas aislados no pertenecen a la iglesia oficial, que abolió la poligamia hace más de un siglo y abrió el sacerdocio para hombres de todas las razas hace 30 años.
“Hay personas que todavía no conocen bien la iglesia y pueden surgir ese tipo de preguntas, pero aquellos que conocen a los miembros de la iglesia saben que tienen una sola esposa", dijo Claudio Zivic, primer consejero de la división de Sudamérica de la iglesia.
Los mormones creen que Joseph Smith, quien fundó la religión en 1830 en Nueva York, era un profeta a quien Dios y el ángel Moroni le pidieron restablecer la iglesia cristiana.
Aunque el crecimiento es reciente, los mormones tiene historia en Latinoamérica. A fines del siglo XIX, ante la presión de Estados Unidos para renunciar a la práctica de la poligamia, grupos de mormones se mudaron a las montañas de Sierra Madre en México y establecieron colonias.
En 1920, el libro de los mormones fue traducido al español, pero la iglesia comenzó a crecer realmente tras la Segunda Guerra Mundial con la expansión geopolítica de Estados Unidos.
En esos momentos, la iglesia puso énfasis en los centros de entrenamiento para enseñarles qué hacer, qué usar y qué decir mientras estaban afuera representando
“la cara de la iglesia".Miientras que en Estados Unidos Los Santos de los Ultimos Días pelean para ganar aceptación debido a sus vínculos pasados con la poligamia, en Argentina planean construir un segundo templo.
DatosA continuación, algunos datos sobre la Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Ultimos Días, según el nombre formal empleado por los mormones:
* El grupo, alguna vez aislado, con sede en Salt Lake City, Utah, es una de las religiones de más rápido crecimiento y de más afluencia. Más de la mitad de sus 13,5 millones de miembros vive fuera de Estados Unidos.
* La comunidad mormona está floreciendo en América Latina, especialmente en México y Brasil, y ya cuenta con 5,2 millones de miembros y 5.500 capillas.
* La iglesia mormona es de orígen estadounidense. Fue fundada en 1830 en Nueva York por Joseph Smith, quien dijo haber recibido la palabra de Dios de un ángel llamado Moroni que lo guió a las tablas que contaban la historia del Libro de los Mormones sobre una antigua civilización de israelíes enviados por Dios a América.
Un año más tarde fue perseguido y forzado a huir hacia el Medio-oeste, donde fue asesinado. Sus seguidores comenzaron una migración de 1.800 kilómetros en 1846-1947 hacia Utah.
* Los mormones tienen tres libros de las escrituras, además de la Biblia. Uno es el Libro de los Mormones, que los fieles creen que fue traducido de platos de oro descubiertos por Smith. Sus partidarios se rehusan a consumir alcohol, café o tabaco.
* La iglesia mormona originalmente permitía la poligamia. La costumbre fue oficialmente prohibida en 1890 cuando Washington, enojado por su propagación, amenazó con negar la condición de estado a Utah. Hoy, líderes mormones se distancian ellos mismos de los alrededor de 40.000 mormones de Utah y de los estados aledaños que ilegalmente continúan con esa práctica.
* Actualmente, cerca de 50.000 misioneros, habitualmente hombres jóvenes en traje que caminan las calles del mundo de a dos, proyectan una imagen sana, familiar, que ayudó a aumentar la cantidad de miembros de la comunidad mormona mundial en un 36 por ciento entre 1995 y el 2005.
Vía Thomson Reuters
Recibimos sus opiniones