Documental y texto de Greivin Moya
En apenas 4 años la iglesia Pasión por las Almas creció como la espuma, pues ahora es dueña de casi toda una cuadra sobre Avenida 10 en San José.
Además, 9 propiedades con valor superior a los $2 millones están a nombre del pastor y su esposa por medio de una sociedad.
Los medios de comunicación y el púlpito son las armas de dicha iglesia para difundir el mensaje plagado de estímulos hacia la entrega.
Pasión por las Almas realiza cultos casi todos los días de la semana y en todos ellos la ofrenda a cambio de prosperidad está presente: Telenoticias lo constató en su edificio principal ubicado en la capital con la ayuda de una cámara escondida.
En nuestro país existen muchísimas iglesias cristianas. Pero algunas no sabemos si interpretan bien los escritos bíblicos o son simples organizaciones que lucran con la fe.
En una de las tantas iglesias cristianas evangélicas que existen en el país, su nombre “Pasión por las almas”, se ubica sobre Avenida 10, a escasos 200 metros al este del Cementerio General.
Se denominan “Comunidad apostólica internacional pasión por las almas” Pero todo parece indicar que su nombre debería ser pasión por el dinero, pues su mensaje es más que insistente de que el dinero mueve la mano de Dios.
Así lo hacen ver en la emisora Radio Unción que posen, donde motivan a las personas a llamar para donar y llenar las boletas con montos de dinero. También en Tv Unción en internet y en los videos de sus cultos y campañas de sanidad que realizan y ponen en la web.
Dependiendo de lo que usted ofrende, en esa proporción usted conseguirá la gracia, la retribución de Dios, que lo hará prospero, algo difícil de creer, pero que sucede entre pastores que profesan este tipo de mensajes y de gente que tiene vacios o problemas y encuentra refugio aquí.
Algunos han entregado lo poco que tienen para conseguir los favores de Dios. Como si la fe se pudiera comprar.
Sin embargo otros se han retirado de la iglesia porque no comparte esa interpretación que se hacen de los escritos bíblicos. Aquí hay semanas en donde vuelcan todos sus recursos para pedir dinero a sus fieles, en las llamadas “cruzadas” o “compañas de la prosperidad”, en donde según sus interpretaciones bíblicas, si usted da usted recibe de Dios.
Para cumplir su objetivo de recaudar dinero no solo utilizan sus cultos de los domingos y de los días entre semana en las noches, también vuelcan toda la acción en la emisora con campañas, todo con el propósito de motivar a la gente para que sean generosos con la obra del señor.
De esta forma mediante sus interpretación de la biblia sobre la ofrenda y argumentando que Dios quiere la prosperidad para todos, las personas se desprende hasta de sus bienes, para cumplir con el mensaje de los pastores.
Con nuestra cámara escondida fuimos al mediodía el 01 de abril a la emisora, en una de estas campañas, donde la gente se congrega para orar y dar la ofrenda, luego de insistentes mensajes bíblicos sobre la siembra, la semilla, la entrega, el pacto el ciento por uno y el pozo de bendición apostólico, que no es ni más ni menos que la alcancía de la recolecta de ese día de la iglesia.
Este es el pozo donde entregan la ofrenda, que según su fe se les retribuirá, pero las manifestaciones aquí son más que evidentes del fanatismo religioso.
En apenas 4 años la iglesia Pasión por las Almas creció como la espuma, pues ahora es dueña de casi toda una cuadra sobre Avenida 10 en San José.
Además, 9 propiedades con valor superior a los $2 millones están a nombre del pastor y su esposa por medio de una sociedad.
Los medios de comunicación y el púlpito son las armas de dicha iglesia para difundir el mensaje plagado de estímulos hacia la entrega.
Pasión por las Almas realiza cultos casi todos los días de la semana y en todos ellos la ofrenda a cambio de prosperidad está presente: Telenoticias lo constató en su edificio principal ubicado en la capital con la ayuda de una cámara escondida.
El fundador de la iglesia Pasión por las Almas, William Magaña Vargas, pasó de una vida sencilla a andar con guardaespaldas y negociar la compra de un jet privado para “facilitar la obra de Dios”.
Y es que definitivamente, en esta propuesta de algunas iglesias cristianas que profesan el dar a Dios dinero y bienes para que Él los multiplique, los que han prosperado en abundancia son los pastores.
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