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La primera vez que tuve uno de sus libros en mis manos fue recien se despertaba en mi la duda. Para mi sorpresa, en su obra "¿Tenían ombligo Adán y Eva?" noté que había pasado por su juventud por la Iglesia Adventista. Algo en común.
Gradner, sin embargo, no fue ateo. Era deísta, o según varios autores era un teísta. Eso sí un crítico fuerte de las religiones organizadas.
Su obra "La ciencia: Lo bueno, lo malo y lo feo" también es maravillosa. Sobre todo si estás estudiando una carrera relacionada con ciencia, o deseas profundizar sobre la naturaleza de la ciencia.
Gracias a Gardner muchas personas pudieron comprender mejor la ciencia, desenmascarar la pseudociencia, la Nueva Era, y al culto de Urantia, el cual expuso en su libro "Urantia: ¿revelación divina o negocio editorial?"
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