La jueza de la Corte Suprema de Justicia, Carmen Argibay, afirmó que promoverá el retiro de "todos los crucifijos de las salas de audiencias" de los tribunales, y aseguró que otros funcionarios judiciales comparten la iniciativa."Yo nunca tuve un crucifijo en mi despacho porque soy una funcionaria de un Estado laico", argumentó la magistrada en una entrevista pública en La Plata, en el marco del V Encuentro de la Red Par-Periodistas de Argentina en Red por una comunicación no sexista. "Tener un símbolo religioso condiciona", afirmó la magistrada que, antes de asumir su cargo en la Corte Suprema de Justicia, se declaró atea.
Esta iniciativa fue respondida por el Arzobispo de la Plata, Monseñor Héctor Aguer, quien descalificó la propuesta por provenir de una persona atea, porque retiraría los valores morales de los juzgados.
El ensotanado mencionó en el programa "Claves para un Mundo Mejor" que el retiro de los crucifijos significará dejar a la sociedad huérfana de valores trascendentes y a merced del agnosticismo y relativismo ético.
¿Acaso los agnósticos y ateos no tienen valores morales?
El Prelado también señaló que se quiere "recluir la expresión religiosa al ámbito de lo privado", teniendo en cuenta que "la iniciativa ha sido planteada esta vez por una persona que ha hecho pública manifestación de ateísmo".
Monseñor Aguer señaló que el crucifijo es, más allá de su valor para los cristianos, "un signo universal que exalta el amor entre los hombres y el triunfo del bien sobre el mal". Por ello, señaló que "no se puede pensar que en la Argentina, donde reina pacíficamente la libertad de cultos, alguien pueda sentirse traumatizado porque haya crucifijos en los despachos de los jueces".
Pues cabe recordarle a Monseñor que más que un signo de amor es un símbolo religioso. Si desean un símbolo de amor universal, que pongan entonces un corazón tradicional. Bien podría imaginarse a un iman afirmando que la media luna islámica debe permanecer en los edificios públicos por ser "un símbolo que exalta al amor". Igual podría argumentar un rabino que quisiera que en los juzgados estuviese la estrella de David en lugar del crucifijo.
No enredemos las cosas, un crucifijo es símbolo del catolicismo, y queda claro que la república Argentina, así como la mayoría de repúblicas occidentales son estados laicos y esto implica una separación entre la iglesia y el estado, además de mantener todas las religiones en un ámbito privado sin que interfieran con los asuntos de estado, y sin que se impogan sobre otros credos, sobre quienes creen en un dios pero no en clero alguno, o sobre quienes no tienen credo.
¿Y usted qué opina?
Si solicitar el retiro de un símbolo religioso es descalificable por ser propuesto por una persona atea, entonces la razón marca que solicitar la permanencia de un símbolo religioso sea descalificable si proviene de una persona religiosa.
ResponderEliminarPor otra parte, me sigue sorprendiendo esa insistencia en ver símbolos propios de un grupo específico como "universales". Sé que ellos se lo creen; lo que no quita que estén equivocados (a fin de cuentas, lo suyo es creer a pesar de la evidencia). Para el caso, la dicotomía lucha entre bien y mal no es universal. Propongo que los símbolos religiosos sean sustituidos con frases de pensadores y humanistas que exalten valores (que las hay por montones), así no se puede acusar amoralidad.
Yo me pregunto, con las deficiencias tan manifiestas en el Poder Judicial es este un tema prioritario? Este tema es el que desvela a los Ministros de la Corte? Si ponemos o sacamos un crucifijo de una oficina que al ateo no le molesta y de ultima al cristiano lo reconforta como un simbolo de su fe? No hay reformas pendientes? juzgados colapsados? informatización de expedientes? etc etc etc . Creo que hay temas mas urgentes y fundamentales para la Republica que este tema menor y a todas luces provocativo, que nada aporta mas que tensiones y recelos que nada aportan. Saludos
ResponderEliminar> Yo me pregunto, con las deficiencias tan manifiestas en
ResponderEliminar> el Poder Judicial es este un tema prioritario? Este
> tema es el que desvela a los Ministros de la Corte? Si
> ponemos o sacamos un crucifijo de una oficina que al
> ateo no le molesta y de ultima al cristiano lo
> reconforta como un simbolo de su fe?
Como buen argentino, Roberto, haces un perfecto uso de la falacia de la falsa dicotomía, a la que los argentinos somos tan adeptos. No, no es lo único de lo que se ocupan los ministros de la corte. Sin embargo, es un tema importante. No sé si eres ateo o no (sospecho que no), pero a este ateo sí le molestan los crucifijos en los lugares públicos, y considera que el artículo 2º de la Constitución Nacional Argentina es una vergüenza para cualquier país que se pretenda moderno y cuyos gobernantes hagan uso de la razón.
"Nada aporta más que tensiones y recelos que nada aportan". Además de la repetición ("¿eshtásh nerviosho?") queda claro que ignoras deliberadamente el rol venenoso de la Iglesia Católica en nuestro país, donde se ha ocupado se realizar inmundas campañas contra la educación sexual, uno de sus purpurados dijo que un ministro merecía la muerte por tener una campaña en la que se repartían preservativos en los colegios, y su perimida, absurda e irracional ideología impide que médicos y jueces cumplan con las leyes vigentes proporcionando abortos a mujeres y niñas violadas que así lo solicitan. Entenderás que alguien como yo pueda disfrutar profundamente cualquier victoria, simbólica o concreta, que permita ir restando influencia de la ICAR de todos los lugares donde ha metido impropiamente sus zarpas.
Las decenas de miles de denuncias sobre desaparición de personas durante la dictadura, los "hábeas corupus", ¿los habrán recibido jueces con un crucifijo en su juzgado? Por supuesto que sí. Entonces la presencia del crucifijo puede ser que actúe en contra del amor. Así que por lo menos habría que probar, a ver si mejora la Justicia, sacándolos de los Juzgados... Pero mi pensamiento está descalificado porque yo no soy católica, según "Sonseñor" Aguer, que no es "mon" señor para mí. Entonces, sería bueno que los católicos fueran los que pidieran, generosamente, plenos de amor, que sacaran los crucifijos de los Juzgados, Hospitales Públicos, el Aula Magna del Colegio Nacional Buenos Aires. Eso sería una muestra de amor.
ResponderEliminarY quiten vuestros rosarios de nuestros ovarios.
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